Un problema bastante habitual en gran número de teléfonos móviles y tablets Android es el de las apps que se congelan o cierran de forma inesperada. La principal causa de estos bloqueos y congelamientos es la descarga de numerosas apps que van acumulándose en la memoria del teléfono y ralentizan su rendimiento. A medida que se actualiza el sistema operativo Android, o las mismas apps, el teléfono empieza a generar errores y las apps se tildan o dejan de funcionar de manera abrupta. Te contamos cuál puede ser una solución en caso de que tus apps se cierren de forma abrupta o queden congeladas en alguna pantalla.
Las aplicaciones pueden tener errores y funcionar incorrectamente, le sucede a apps tan famosas como Facebook o Instagram, y también a otras menos conocidas. Ni siquiera depende de tener un Smartphone de alta gama. En teléfonos como el Samsung Galaxy S7 o el HTC 9 se pueden presentar errores de rendimiento o pantallas congeladas al correr alguna app puntual.
El tipo de conexión a Internet es una de las razones habituales que suele generar congelamiento en las apps. Otro movito puede ser la programación de una app, si no es efectiva, el teléfono presenta errores y las apps se cierran de forma inesperada. Tampoco descuides la memoria interna del teléfono, recuerda limpiar el cache para que las apps de uso frecuente no llenen tu dispositivo y generen errores.
Si una app te está dando problemas, prueba reiniciando tu dispositivo. Esta es la forma más efectiva para terminar con todos los procesos que están activos y consumiendo memoria de tu teléfono móvil. También se cierran las apps que corren en segundo plano, motivo por el cual liberas la memoria que puede haber quedado ocupada en el sistema pero sin utilizarse. En la mayoría de los casos, reiniciar el teléfono hará que todo funcione más rápido y que las apps no se congelen.
Actualizar las apps es otra solución, ya que permite contar con los archivos actualizados del sistema que corrigen bugs y errores de programación que pueden generar incompatibilidades de la app con tu móvil o con la versión de tu sistema operativo. También debes actualizar el sistema operativo para evitar cualquier incompatibilidad presente en el sistema.
La última solución puede ser revisar la calidad de la conexión a Internet. Muchas apps dependen casi totalmente de tener un buen servicio de conexión, cuando una red WiFi o tus datos no conectan correctamente pueden crear fallos en las apps.
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